Aprovechando el comentario de Guionista Hastiado sobre "risas latosas" voy a referirme a la gala de la quinta edición de Notodofilmfest que se celebró el pasado miércoles.
Como espectáculo de entretenimiento tengo que decir que no fue la cumbre del divertimento, pero sí fue amable y simpática. Presentó la gala Paco León que se está haciendo un auténtico profesional de estos eventos (es la segunda entrega de premios de cortos que veo presentada por él, y eso que sólo he asistido a tres).
He de reprochar a los organizadores una cosilla, hubiera sido más bonito el haber proyectado los cortos nominados en vez de los cortos del jurado. Balagueró, Sánchez Arévalo, etc. no necesitan tanta publicidad como los cortometrajistas que enviaron piezas al festival.
Después de esta disgresión vamos al tema principal. El premio al mejor documental se lo llevó "Fajas y Corsés" de Víctor Moreno Rodríguez. Este corto lo vi yo hace tiempo sentadito delante de mi monitor y no me hizo nada de gracia. Es más, nunca pensé ni que pudiera llegar a finalista. El miércoles, después de haber proyectado ya unos cuantos cortos, al verlo en la gala, con un público no especialmente entregado a todo lo que se veia, sufrí el despertar de la conciencia social, del agrupamiento étnico, del aborregamiento colectivo, de que la comedia sin público no es comedia. Fue el corto que más gustó, el que más risas obtuvo y el más aplaudido. La risa es contagiosa, el llanto no. El llanto es íntimo, no público. No nos gusta mostrar nuestras miserias pero sí nuestra felicidad.
Conclusión, cuando hagas comedia no pienses en tí mismo, piensa en una sala llena de público. Eso si piensas en alguien cuando escribas, si no es así, olvida todo este panfleto.
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